Un año más Villena a celebrado su tradicional corrida de toros con la que honran a su patrona la Virgen de las Virtudes en una plaza portátil, mientras se continua con la restauración de la antigua plaza de toros que, casi seguro, será inaugurada el próximo año a comienzos de temporada.
VILLENA (Alicante). Martes, 7 de Septiembre de 2010
Informa.- JOSÉ MARIA JERICÓ. Fotos.- BENITO S. LEYVA
La corrida como es habitual en esta población alicantina constituyo todo un acontecimiento en el que el publico, que casi lleno la plaza, se lo paso en grande. La tradicional corrida de toros del 7 de septiembre es una fiesta a la que el publico va a divertirse sanamente y a volcarse con los toreros para facilitarles el triunfo, y a fe que lo consiguieron al repartir ocho orejas y un rabo de la buena corrida que los Hermanos Lozano con el hierro de ‘Alcurrucen’ enviaron a Villena.
Ruben Pinar realizo lo mas meritorio de la tarde a fuerza de insistir ante la cara de sus oponentes y gracias a la técnica que este joven torero esta adquiriendo. Toreo con verdad y sentido a sus dos toros con ambas manos, sacando muletazos largos y siempre llevando al toro encelado en el engaño, que maneja con temple y una buena dosis de mando. Corto las dos orejas del primero y las dos y el rabo del quinto, un cinqueño con el que había que estar firme y decidido. Rubén Pinar es un torero que se ha ganado estar en todas las ferias importantes en la próxima temporada.
Juan José Padilla, se ha convertido en un autentico ídolo del publico villenense, tanto es así, que lleva tres años seguidos acudiendo a esta cita. Su simpatía y el saber conectar con los públicos hacen que la gente le adore y quiera estar con él. Así, Padilla participo el día anterior en él desfile de las comparsas cristianas, desfilando con la comparsa ‘Contrabandistas’, disfrutando del ambiente festero. Lo mejor de su actuación vino al banderillear a sus dos toros, ejecutando bien la suerte y clavando arriba con acierto muy reunido. En el primero al que castigo en varas con un señor puyazo se silencio su labor, cortando las dos orejas del cuarto después de una faena marca de la casa que enalteció al público.
Alejandro Esplá escucho palmas tras aviso en su primero, un toro con el que no llego a acoplarse, y corto las dos orejas al último de la tarde tras una faena en la que puso algo más de decisión y al que mato de una hábil estocada.
Al final los tres fueron sacados a hombros de las peñas, acompañados del saludable jolgorio que invade durante estos días la población de Villena.
LA FICHA:
Toros de Alcurrucen en general bien presentados y de juego desigual.
JUAN JOSÉ PADILLA, silencio y dos orejas.
RUBÉN PINAR, dos orejas y dos orejas y rabo.
ALEJANDRO ESPLÁ, ovación tras aviso y dos orejas.
ENTRADA: Casi lleno.
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